La aplicación Tik Tok ofrece un crecimiento explosivo para los creadores de contenidos. Los cocineros de la Generación Z lo aprovechan.
Por Taylor Lorenz/The New York Times
Eitan Bernath, una estrella de TikTok de 19 años con más de 1,6 millones de seguidores, comenzó a publicar contenido gastronómico en la plataforma en 2019. Como muchos chefs de la generación Z de TikTok, aprendió a cocinar viendo YouTube y Food Network. Compartía las cosas que hacía en Instagram, pero nunca adquirió mucho protagonismo.
Sin embargo, a las 24 horas de publicar su primer tiktok, había acumulado decenas de miles de seguidores. Bernath, de actitud alegre, optimista y accesible, empezó a compartir recetas cortas y fáciles que otros cocineros principiantes y sus compañeros adolescentes podían hacer en casa. Los videos tuvieron mucho éxito.
“TikTok es lo más grande que me pasó en mi carrera y, a decir verdad, es la razón por la que estoy donde estoy hoy”, aseveró.
En 2018, cuando TikTok llegó a Estados Unidos de manera oficial —para entonces ya era bastante popular en otras partes del mundo— se conocía como una aplicación para mover los labios en perfecta sincronía con una canción y presentar retos de baile. Pero los contenidos gastronómicos irrumpieron en la plataforma a principios de 2020, cuando millones de personas se quedaron atrapadas en casa durante la cuarentena y cocinar se convirtió en un pasatiempo. Los videos con la etiqueta #TikTokFood han acumulado en conjunto 25.200 millones de visualizaciones y la aplicación genera modas gastronómicas virales con regularidad, como el café batido y un plato de pasta con feta y tomates al horno que ahora se conoce como la “pasta TikTok”. Un video que muestra cómo hacer un pastel de galletas Oreo con tres ingredientes ha conseguido más de 42,1 millones de visitas.
TikTok también se ha convertido en la plataforma para una nueva generación de estrellas culinarias que no han tenido que trabajar durante años en una cocina profesional ni en una revista gastronómica y que a menudo presentan recetas que encuentran en internet en lugar de desarrollar las suyas. Se han hecho famosos en la red con sorprendente rapidez.
“Lo que hace que TikTok destaque en comparación con cualquier otra plataforma es la velocidad de escala”, afirma Eunice Shin, directora de medios y entretenimiento de Prophet, una empresa de estrategia de crecimiento. “Si algo se vuelve viral, puedes pasar de cero a millones de seguidores en cuestión de meses. Eso es muy difícil de conseguir con una trayectoria tradicional”.
Nadie ha aprovechado esta oportunidad más rápido que los integrantes de la generación Z. “La tendencia que estamos notando es la de talentos cada vez más jóvenes que se hacen un nombre como resultado de la adopción de la plataforma”, explicó Jad Dayeh, jefe de medios digitales de Endeavor, una importante agencia de talentos.
Muchas estrellas de la generación Z en FoodTok, como algunos llaman a la comunidad gastronómica en la aplicación, se preguntan por qué alguien se sacrificaría en un trabajo agotador en un restaurante cuando podría estar construyendo su propia marca en internet. Otros están abandonando sus trabajos en restaurantes para dedicarse de tiempo completo a la creación de contenidos. Y varios están ganando dinero a través del fondo de creadores de TikTok, cuyos pagos dependen del número de visitas que reciben los videos y a través de acuerdos publicitarios y patrocinios.
Los creadores de TikTok pueden ganar desde unos cuantos dólares hasta millones. La estrella de TikTok Addison Easterling, que produce contenidos de estilo de vida, ganó más de cinco millones de dólares tan solo en 2020, según un informe de Forbes. Tabitha Brown, una cocinera vegana, tiene más de 4,7 millones de seguidores en TikTok y lanzará su primer libro de historias personales inspiradoras en otoño. Christian Paul, un panadero de Atlanta con más de 1,3 millones de seguidores en TikTok, creó su propia línea de barras de chocolate.
Algunos prometedores creadores de contenido de alimentos aseguran que ya ganan seis cifras al año. En última instancia, lo que quieren es construir sus propios negocios, ya sea con el lanzamiento de una línea de utensilios de cocina, la publicación de un libro de recetas o la apertura de un restaurante. Lo que no quieren es trabajar para alguien más.
Muchos dicen que la falta de formación convencional es una clave de su éxito.
“Si nos fijamos en los principales protagonistas de los medios de comunicación gastronómicos tradicionales”, dice Bernath, “todos tienen formación clásica o son chefs de restaurante. Tienen mucho que ofrecer y una gran cantidad de conocimientos culinarios, pero creo que lo que TikTok ha hecho con la generación Z y al enseñar a la gente cómo cocinar, es mucho más cercano. El comentario que escucho todo el tiempo es: ‘Si este Eitan de 18 años puede cocinar esto sin esfuerzo, entonces yo también puedo’”.
Cada plataforma es pionera en un nuevo tipo de contenido gastronómico viral. Facebook y BuzzFeed Tasty inauguraron una era de recetas fáciles de seguir preparadas por un par de manos incorpóreas. YouTube ofreció un hogar para recetas más complejas y vlogs de cocina de 20 minutos. Instagram llevó las delicias virales listas para la cámara a las masas con fotos de “cronuts”, una mezcla de croissant y dona, y hamburguesas que en lugar de pan usan pasta ramen frita.