No es la primera vez que el reconocido investigador del eterno fenómeno OVNI nos toma el pelo, ya lo hizo en los 90 durante el programa Otro Rollo de Adal Ramones y Yordi Rosado donde presentó un brazalete supuestamente de un ser de otro mundo con el cual se podía transportar a otros lugares, años después se supo la farsa.
En una sesión especial del Congreso mexicano, se exhibieron los cuerpos de dos supuestos seres “extraterrestres”. Los cuerpos fosilizados, presentados en vitrinas de cristal por el periodista y científico Jaime Maussan, tenían supuestamente mil años de antigüedad.
Maussan declaró bajo juramento: “Estos especímenes no forman parte de la evolución de nuestro mundo. No proceden de un desguace de ovni. Se encontraron fosilizados en una mina de musgo diatomeo”, afirmó.
Maussan explicó que las muestras fueron analizadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y que los científicos que consiguieron muestras de ADN aplicaron pruebas de radiocarbono para determinar su antigüedad.
Sin embargo, este miércoles la Universidad Autónoma de México, emitió un comunicado derivado de la misma situación que ahora vuelve a ocupar la atención mediática donde el Instituto de Física (LEMA). “Los trabajos de datación por carbono 14 que se llevan a cabo en el LEMA únicamente están destinados a determinar la antigüedad de la muestra que trae cada usuario y en ningún caso hacemos conclusiones sobre el origen de dichas muestras”.
“El LEMA se deslinda de cualquier uso, interpretación o tergiversación posterior que se haga con los resultados que éste emite. En el caso del análisis de junio de 2017, cualquier información que implique la participación del LEMA en cualquier actividad distinta a la datación por Carbono 14, carece de total validez”.
Pero la culpa no es totalmente de Maussan, sino de quienes lo llevaron al Congreso.