Como si fuera poco con la temporada de estiaje que nos deja sin agua y los días de alta sensación térmica que llega hasta los 51 grados, nos tocará sufrir un poco más con el domo de calor de este año. Pero qué es y porqué nos afecta en México.
El domo de calor es un evento climático que ha convertido amplias franjas de México en hornos a fuego lento. Este fenómeno es algo más que un evento aislado; se trata de un patrón atmosférico sofocante, una especie de gigantesca burbuja de aire caliente que se forma bajo las condiciones de alta presión. Cuando la presión atmosférica empuja el aire caliente hacia abajo, actúa como una tapa que encierra el calor.
ORIGEN DEL FENÓMENO
En primera instancia, todos los indicios apuntan a que estos sucesos de domos de calor están intrínsecamente vinculados a fluctuaciones drásticas en las temperaturas oceánicas. Es un efecto dominó en toda regla: el agua caldea el aire, este aire calentado avanza hacia el interior de la tierra y, al encontrarse en tierra, queda confinado por un sistema de altas presiones alojado entre dos masas de agua cada vez más cálidas