El joven de Coatzacoalcos, quien hasta no hace mucho sufría y era víctima de la influencia de cosas que afectaban su vida, sin que él pudiera hacer nada, compartió su experiencia para que cualquiera pueda restaurar sus emociones
Por Coatza Hoy
Como muchos en la actualidad, Carlos de Jesús Antonio, vivía sin mucho sentido, aunque sí lleno de coraje, ira, rencor, frustración y otros sentimientos que lo abordaban constantemente a tal grado de intentar el suicidio. No sabe bien de dónde provenía todo lo malo que contenía, aunque menciona que el tipo de música que escuchaba pudo influir en sentirse atraído por rituales para sentirse bien pero que nunca tuvieron efecto positivo en él.
Una de las cosas de las cuales se burlaba Carlos era la práctica cristiana de bautizar en la playa o como algunos llaman “bajar a las aguas”, y que tal vez no imaginó que un día sería él quien sería zambullido para renacer.
“Ansiedad a todo lo que da, una profunda depresión obscura, a la menor provocación me iba a los golpes. Al carnaval, feria y playa de Semana Santa iba a diario, del malecón no salía; cada fin de semana recorría cada antro y todos los excesos por haber, fue brutal. Solo por obra de Dios llegué vivo y el día de hoy estoy aquí, ahora sí viviendo la vida, en paz, con el alma restaurada”, compartió en redes sociales.
Carlos compartió su experiencia para que cualquier persona que atraviese por lo mismo sepa que existe una solución a todo ese sufrimiento.
“Esta publicación es para la persona que esté atravesando lo mismo o algo más difícil, tu que siempre has tenido un vacío en tu pecho, déjame decirte que nada llenará tus vacíos mas que el señor Jesús, no hay problema o enfermedad de la que el no te pueda sacar, solo lo tienes que buscar”.
“Todo lo que el Padre me da, vendrá á mí; y al que á mí viene, no le hecho fuera. Juan 6:37” .
